Mudarse cuando tienes muchos papeles, cartas, fotos, mapas, hojas y otras cosas resulta equivalente a ir de montañismo. No sabes que es lo que te servirá y no me puedo permitir cargar con demasiadas cosas asi que hemos de arrojar mucha basura. También sirve para encontrar con mucho gusto o disgusto, antiguos cds o libros o loquesea que pensabas haber extraviado, pero que nó! o sorpresa están intactos debajo de un mapa de bus. También me encuentro con muchas guias de lugares que supongo he visitado, los cuales con mucho entusiasmo he recogido de algún mostrador con la mera intención de leerlos en el futuro. Me parece que lo hago por la ansiedad de conocer al detalle lo que visito, pero me he dado cuenta que es un caso muy raro que llegue a casa y me siente a leer sobre mi viaje. Una buena terápia es este blog, que me ayuda a escribir los sucedido dia tras dia. Aunque por tiempo o por pereza...bendita pereza que no me dejas hacer todo lo que deseo...no escribí mi viaje a París.
Entonces, siguiendo con la mudanza, ya que no puedo cargar con muchas cosas, he de acomodarlas lo mejor posible. Felizmente estoy de vacaciones así que el tiempo no es una variable a tener presente. Debería tener una semana extra para acomodarme y poder conocer el nuevo barrio, pero creo que lo haré en "fast-track", es decir haciendo camino al andar...
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